Estudiar el sector para identificar tu estrategia y tus oportunidades de compra o venta de un despacho profesional.
Si queremos acometer un proceso de crecimiento basado en adquisiciones o fusiones, o incluso de venta de nuestro despacho, reflexionar sobre las características del sector.
La estructura del sector de los despachos profesionales en España viene marcada por dos elementos fundamentales.
El primero de ellos sería el gran número de firmas profesionales que operan dentro de él y, el segundo, su grado de heterogeneidad.
Sabemos que en dicho sector conviven despachos de muy distinto tamaño:
Desde los especialistas independientes hasta los grandes despachos nacionales e incluso, desde hace ya bastantes años, alguna que otra gran firma internacional. Todo ello sin descuidar los pequeños y medianos despachos que, no olvidemos, son las más comunes y los más extendidos en el sector.
“Estos tres tipos de despachos [despachos grandes, medianos y pequeños] están en el mercado y cada uno de ellos cumple una función específica, aunque en ciertos aspectos puedan solaparse.
Hay asuntos que los despachos grandes podemos hacer mejor que los pequeños y viceversa”
(Emili Cuatrecasas)
Otro factor fundamental de segmentación del sector de los despachos profesionales sería el ámbito funcional, Entendiendo por ésta no las áreas de actividad o de negocio concretas (fiscal, procesal, mercantil, laboral…), sino la orientación dada a los servicios profesionales prestados.
En este sentido, en la actualidad tres serían los modelos de despacho profesional que convivirían dentro del mercado español:
- El despacho que ofrece un servicio global y/o integral.
- Ofrece unos servicios altamente especializados y que dentro del sector recibe el sobrenombre de boutique.
- Es un despacho multidisciplinar que ofrece servicios relativos a diferentes áreas de especialidad (por ejemplo, fiscal y laboral, pero no determinados ámbitos de jurídico), sin llegar a ofrecer soluciones integrales a sus clientes ni tampoco un servicio altamente especializado.
Para ello vamos a plantear como ejercicio responder y trabajar sobre las siguientes dos cuestiones siguientes, todo ello con base en los estudios realizados www.observatoriodeldespachoprofesional.com. Sin olvidarse que el sector de los despachos profesionales se caracteriza principalmente por la existencia de un fuerte nivel de competencia y una gran atomización.
1. ¿CREE USTED QUE EN SU SECTOR HAY MUCHA COMPETENCIA?
Las razones que parecen fundamentar esta percepción son, por un lado, la existencia de un gran número de firmas que se dedican a la misma especialización de servicio y, del otro, el hecho de que éstas se hallen concentradas geográficamente.
No en vano casi el 70% de las asesorías declaran tener que disputarse su cuota de mercado con otras 50 o más entidades homólogas en su mismo territorio.
2. ¿PODRÍA INDICARNOS EL NÚMERO APROXIMADO DE DESPACHOS PROFESIONALES QUE REALIZAN ACTIVIDADES PARECIDAS DENTRO DE SU MISMO ÁMBITO GEOGRÁFICO?
A estos dos factores además habría que sumar el aterrizaje en territorio español de firmas internacionales procedentes del Reino Unido, USA, Alemania, Francia, Holanda o incluso Bélgica.
Si bien dicho aterrizaje en sus inicios solo afectaba a los grandes despachos hoy en día podemos afirmar que está afectando a todo el sector en general.
Ahora bien, este incremento de la competencia, y más después de la gran crisis económica vivida en España, ha tenido una notable incidencia tanto en la forma de operar de los despachos profesionales como en la prestación de las respectivas carteras de servicios.
Así pues, las asesorías y firmas de abogados, con el fin de garantizar su supervivencia en un marco de competencia creciente, se han visto obligadas a aumentar sus niveles de profesionalización y de eficacia y eficiencia.
No respecto a los servicios prestados, que ya se hallaban a un gran nivel técnico, sino en relación con la gestión del propio despacho profesional.
En este sentido, es curioso observar que ya nadie discute que los despachos profesionales son empresas.
Es decir, como organizaciones privadas que persiguen la maximización de sus beneficios; y que para ello aplican toda una serie de técnicas gerenciales, como si en el pasado sus actividades profesionales no se hubieran enmarcado en este mismo contexto empresarial.
Se ha evolucionado del concepto de despacho tradicional al de empresa de servicios jurídicos. Ya no basta con contar con los mejores abogados, lo que lógicamente siempre será un pilar fundamental. Ahora, además, hay que aplicar principios y técnicas de gestión empresarial que, hasta hace pocos años, a los despachos les eran totalmente ajenas
(Álvaro Écija)
En cuanto a la prestación de servicios, estos niveles de competencia, sobre todo motivado por la gran crisis económica sufrida, sumando además los efectos económicos generados durante los años de pandemia del COVID.
Esto hn propiciado, por un lado, una presión a la baja en las tarifas de todos los servicios en general. Del otro, un aumento de la calidad de los mismos, como consecuencia también de los mayores niveles de exigencia de los clientes.
Base a estos antecedentes, recomendamos realizar un diagnóstico previo, teniendo en cuenta las características de nuestro despacho, sus puntos fuertes y objetivos.
A partir de ese análisis y reflexión será más rápido y fácil acometer cualquier prospección de búsqueda o incluso negociación si surge alguna oportunidad.
Recuerda; Estudiar el sector para identificar tu estrategia y tus oportunidades de compra o venta de un despacho profesional.